Las gotas de agua estremecen mi piel. El calor del baño despierta mis sentidos. Los pezones erectos ansían tu lengua sobre ellos. La esponja se desliza lentamente entre mis muslos. Aprieto mi sexo contra ella logrando que una oleada de deseo me posea. Sí. Estoy caliente. Muy caliente. Cierro los ojos y sólo puedo imaginar tus dedos clavándose en mi interior. Follándome con ese ritmo salvaje que sólo tú sabes imponer. Empiezo a gemir suavemente y mis manos desean abrirse paso entre mis piernas. Sin embargo recuerdo tus palabras
- Espérame mojada.-
- ¡Sí! Aquí estoy empapada y excitada- susurro al tiempo que todo mi cuerpo se agita al escuchar el sonido de tus tacones pisando con firmeza el camino que te lleva hasta mí.
8 comentarios:
Ufff...me ha pasadoo me ha pasadooo!! Aunque bueno, no eran tacones y tampoco me atreví a abrir la puerta del baño..
Prometo ser mas valiente.
Me encanta tu blog preciosa! Está muy hot hot.
Besotes..y gracias por la visita. Ahora me doy una vuelta por tu otro blog.
Mar.
Sí, sí, sí. La cosa está MUY calentita:)
jurrrrrr, po la gloria mi madrerrrrrr pecadora!!!! jajajajaj dios dios, QUIERO una esponja!!!!jajajaj apufff, ha estado sobervio todo menos esa foto, a mi me da un poco de mal rollo y grima nena :S
Bueno pues coge la esponja y cierra los ojos... :)PP
Un recibimiento exquisito, no quedará defraudada. Igual que nosotros.
Besos y más para ti.
Yo no puedo decir lo que siento. Soy la Princesa.
Creo que se quedó con ganas de más. Así es que volverá esta noche:))
Querida Letizia. No lo digas. Sólo siéntelo. Un saludo:))
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